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Humberto Cruz
Con la proliferación de puestos de ambulantes en el parque central de La Crucecita, el presidente municipal de Santa María Huatulco, Geovanny González provocó la primera protesta formal del comercio establecido en los más de 30 años de ese destino turístico que había sido calificado como ejemplar por la capacidad de organización de sus habitantes.
A la mala racha que han enfrentado las y los propietarios de establecimientos formales en Santa Cruz y la Crucecita, se suman las malas decisiones del cabildo que encabeza el presidente municipal.
Los comerciantes y prestadores de servicios turísticos han tenido que soportar los efectos de los terremotos, la colocación de puestos temporales en el parque central por la reconstrucción del mercado 3 de Mayo, luego los 3 meses de actividades suspendidas por efecto de la pandemia y como si no fuera suficiente la reposición de pavimento en el primer cuadro de la ciudad que otra vez, obligó a cerrar negocios por un largo período.
Con la proximidad de la temporada vacacional de Semana Santa, los micro y pequeños negocios de Huatulco esperaban recuperar algo de ventas pero la invasión del parque central por parte de vendedores ambulantes que presumen permisos de las autoridades municipales despertó el hartazgo y la rebelión del comercio formal.
La primera medida adoptada por los manifestantes fue cerrar de manera simbólica los accesos al parque y horas más tarde se presentaron la síndica y la agente municipal pero llegaron solo a exhibir públicamente su falta de coordinación y delante de las y los propietarios de negocios formales se acusaban mutuamente por los “permisos otorgados” para la colocación de ambulantes.
A pesar de la delicadeza del tema, éste, no es el único problema que enfrenta el presidente municipal Geovanny González, la falta de capacidad de gestión derivó en el recorte del presupuesto a FONATUR que ponen en riesgo los servicios elementales en el destino turístico como la recolección de basura y el abasto de agua.
El presidente municipal tampoco pudo o no quiso resolver las invasiones de predios dentro de las áreas naturales protegidas de Bahías de Huatulco y cierra su gestión con la aparición de decenas de puestos ambulantes que parecen contar con la protección de las autoridades municipales.
