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Maira Ricárdez
La pólvora ya es prácticamente un mito en el tema de la pirotecnia, el riesgo actual es más grave aún, ahora lo más perjudicial es la combinación de sustancias para la fabricación de diversos artículos que llamas mucho la atención de las personas, particularmente de menores de edad, por su nivel de estridencia y dimensión de estallido; lamentablemente la mayoría de personas desconoce totalmente que tipo de artefactos están comprando y detonando sus hijos, hay artículos por ejemplo que con solo introducirlos en el bolsillo -algo muy común en niños-, con el frotar de la ropa y el sudor, pueden estallar dejando consecuencias graves, hasta amputaciones; explica un especialista en el tema, Jefe de la Unidad del grupo de respuesta inmediata de Protección Civil Estatal, Guillermo Pedro Matter.
La carga pírica de los productos que cada vez se vuelven más comunes en los mercados es ya muy alta alertó, los papás deben saber que ya no es lo mismo de cuando ellos fueron niños; no se trata de pirotecnia china, estos productos los elaboran en el Estado de México, y son letales si no se manejan bajo supervisión de un adulto, hablamos del denominado “hulk”, “máscara del diablo”, “huevos de codorniz”, “garra de tigre”, entre otros.
Y es que hasta los considerados inofensivos “chifladores” si un adulto no supervisa la forma en que se detona generan graves percances, si caen en pasto seco calcinan hectáreas enteras y al interior de las viviendas han generado ya también graves explosiones., apenas en el marco de la navidad refirió Matter, Protección civil atendió un total de 33 incendios en la zona de Xoxo, y todos tuvieron que ver con pirotecnia lamentó.
Los esfuerzos de las instancias de protección civil se quedan cortos lamentó por la falta de responsabilidad por parte de padres y madres de familia que admiten que sus hijos compren estos productos y peor aún, que les permiten salir a quemarlos sin vigilancia adulta. Hay productos insistió que están ya prohibidos para su venta y este tipo de productos fueron hallados por millares en la central de abasto en el operativo de decomiso de este miércoles 29, se recuperaron 400 kilos pero hay muchísimo más lamentó, y están a la alcance de todo niño y niña cuyo padre le permita adquirirlo sin estar consciente de que “quemar estos cuetitos” podría ser el último juego del menor o de alguno de sus familiares.
