#RedacciónOaxaca

#Oaxaca

Maira Ricárdez

Lolita no espero este nivel de respuesta, pero se alegra y agradece a la ciudadanía, pues su teléfono no ha dejado de sonar solicitándole “dejadas”, señala la conductora de la unidad 551 del Sitio del Valle, esto a partir de la difusión de su oficio como taxista, de ella y de un grupo de amigas mujeres taxistas refiere, que ante la escalada de la inseguridad en Oaxaca también, ofrecen su servicio como mujeres taxistas, pero además, madres de familia y personas solidarias y sensibles en estos tiempos convulsos.

Las y los pasajeros se siguen sorprendiendo cuando abordan la unidad y se encuentran con una mujer taxista, pese a tener en lo personal, más de 17 años de servicio refirió; pues ante la prevalencia de hombres conductores, ellas como minoría pasan desapercibidas; sin embargo el plus, es que ofrecen como mujeres, confianza y solidaridad, con hombres y mujeres recalca Lolita, pues todos, de cualquier edad, podemos estar alguna vez en situación de riesgo o vulnerabilidad.

Esta breve red de mujeres taxistas es una red de amigas explicó, entonces fue a Lolita a quien se le ocurrió, ante acontecimientos contra chicas a la alza, ofrecer un servicio personalizado y directo para chicas; sin embargo no es exclusivo insistió, su taxi recibe a hombres y mujeres con una garantía de confianza subrayó, pues Lolita además de taxista es madre y padre de tres, ahora jóvenes, que sacó adelante con su esfuerzo tras el volante, los y las taxistas refirió, “somos además de conductores, psicólogos, doctores, maestros, etc., y esta sí es una condición de género” destacó, “las mujeres somos más sensibles a una petición de ayuda en situaciones de riesgo”. 

Desde lo que observa por su condición de trabajo, Dolores Ríos consideró que la escalada de la inseguridad se viene dando desde hace ya muchos años, pero ahora estamos enterados de manera inmediata a través de diversos mecanismos digitales, se sabe más, pero inseguridad siempre ha habido anotó, ella por ejemplo en el 2006 cuando e conflicto de la APPO fue asaltada tres veces en el mismo año, y desde entonces, desde antes y como ahora, la exigencia a la autoridad siempre ha sido de seguridad, sin que eso suceda hasta hoy.

Por último, Lolita invitó a actuar ante lo que vivimos, si la autoridad se mantiene inerte somos la ciudadanía quien requiere un cambio de conciencia, en la formación y educación de nuestros hijos, pero también en la calle en la vida real, ser solidarios quien lo necesita, todas y todos podemos estar en cualquier momento en una situación de riesgo o desgracia y la gran diferencia la puede hacer quien se cruce frente a nosotros en ese momento.

Lolita Ríos 951 1450577