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Citlalli López Velázquez
Cuatro kilos de pet puestas en manos de “Despetsas tiendas comunitarias” no son basura, es lo equivalente a un kilo de arroz o de frijol.
“Esto surgió al ver la necesidad que está pasando mucha gente en estos momentos” relata Montserrat López López creadora de “Despetsas”.
Todo inició en Santa María Atzompa, municipio indígena conurbado a la capital oaxaqueña. Primero a través de la compra del pet y después del canje por “petsos” que sirven para la compra ya sea de alimentos, productos de higiene personal o de limpieza del hogar.
“Nosotros empezamos comprando el PET, pero cuando vimos que hacían mal uso del dinero decidimos canjearlos por producto, fue entonces que nació la tienda comunitaria”.
“Despetsas” es un proyecto que se basa en el trueque de envases de PET por productos de la canasta básica. Nació hace cuatro meses con la intención de contribuir en el rescate del medio ambiente, ser una fuente de empleo para mujeres y ayudar a las familias de bajos recursos.
Tras el éxito en el lugar decidieron llevarlo a otros puntos. Ahora no sólo llegan a colonias de la periferia de la capital del estado, también viajan hacia los municipios de las distintas regiones de Oaxaca, sobre todo aquellos en donde las condiciones de pobreza son altas.
“Lo primero que tenemos que hacer es perifonear para avisar a la gente que estaremos haciendo el canje. Durante toda una semana las familias reúnen el pet ya sea el que generan en casa o el que es tirado en las calles. Al término de la semana nos colocamos en algún punto y las personas llegan con su pet, se pesa su pet, se les da in vale llamado petsos y ese vale lo canjean ahí mismo”.
Una de las experiencias que más le ha impactado a lo largo de este proceso fue la ocasión en la que un niño de no más de diez años hizo una recolección que le permitió comprar una despensa de 300 pesos para alimentar a sus hermanitos.
En las tiendas comunitarias de Despetsas la población pueda cambiar su pet por huevo, leche, cereal o aceite. Cada kilo de pet tiene un costo de cinco pesos. Las personas que acuden pueden canjear desde dos kilos hasta una tonelada. “Nosotros llevamos una tienda muy amplia en producto, tantos productos alimenticios, de limpieza e higiene y limpieza del hogar. Para comprar un kilo de arroz, por ejemplo, las personas tendrían que reunir entre tres y cuatro kilos de pet”, declaró.
Actualmente son siete mujeres las involucradas, mismas que tienen en proyecto una forma de autoempleo que a su vez les permita estar al cuidado de sus hijas e hijos. En un estado con alto índice de pobreza y marginación, las mujeres son las más relegadas laboralmente, señala Montserrat.
Debido a la situación económica que atraviesa Oaxaca, la entidad con mayor inflación en el país, es decir encarecimiento de productos básicos, la demanda en las Despetsas tiendas comunitarias, ha crecido de manera considerable. “Es demasiado, como no te imaginas”, declaró.
De acuerdo con el análisis “La política social en el contexto de la pandemia por el virus SARS-CoV-2”, realizado por el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval), para el segundo trimestre de 2020 el porcentaje de la población con un salario inferior al costo de la canasta básica aumentó de 37.3 al 45.8 por ciento. Oaxaca es el tercer estado con mayor porcentaje de su población en condiciones de pobreza: 66.4.