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Jaime GUERRERO

Sin oposición alguna, por mayoría calificada, el Congreso de Oaxaca, acató la instrucción de su jefe político nacional, Andrés Manuel López Obrador y del Gobernador, Salomón Jara Cruz, al aprobar las minutas enviadas por el Congreso de la Unión, en materia de reforma indígena y de la Guardia Nacional.

Esas modificaciones, la impulsó y priorizó, hasta los últimos días de sus mandato, López Obrador.

La reforma que ha causado las polémica y ha confrontado al oficialismo y la oposición fue la de la Guardia Nacional, qué pasará a ser de la Secretaría de la Defensa Nacional.

Después de la última sesión ordinaria del tercer año legislativo, con 34 votos a favor y dos en contra, avaló la minuta del Senado respecto a reformas relacionadas con la Guardia Nacional que antes, fue aprobada por el Congreso de la Unión, mismo que requiere del aval de 17 legislaturas estatales para ser elevada al rango constitucional.

Con algunas voces en contra y la ausencia de la bancada del Partido de la Revolución Democrática (PRD), así como el desacuerdo del Partido Revolucionario Institucional (PRI), la mayoría del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), y sus aliados, avalaron la minuta con proyecto de decreto.

En la discusión, Luis Eduardo Rojas Zavaleta aunque reconoció al Ejército Mexicano por su destacada labor en el país, y en Oaxaca, mostró un desacuerdo con la reforma al considerar que repercutirá en los años próximos en perjuicio de la sociedad.

“Difiero, pero respeto la decisión de nuestro Presidente y respeto la votación que ya se ha dado en el Congreso federal y en el Senado de la República”.

Por su parte, el diputado Jorge Villacaña Jiménez, votó a favor en lo general, pero observó algunos puntos del dictamen con los cuales mostró inconformidad como el darle capacidad investigadora a la Guardia Nacional y en el ámbito presupuestal.

Por su lado, de la bancada morenista, salieron a favor y resaltaron la función de la Guardia Nacional en la seguridad del país.

Liz Hernández Matus de Morena, aseguró que con la reforma se fortalece el marco jurídico de la institución para maximizar sus operaciones y contribuciones en la estrategia nacional de seguridad pública.

La reforma establece que la Guardia es seguridad pública profesional, permanente, de origen militar con formación policial, dependiente de la Secretaría de la Defensa Nacional; garantizar que la jurisdicción militar no se extenderá a personas que no pertenezcan a la Guardia Nacional y le corresponderá en el ámbito de su competencia, la persecución de los delitos sujeta al Ministerio Público; y con funciones delimitadas por la Constitución y las leyes.

En la misma sesión extraordinaria, con 36 votos a favor, los congresistas aprobaron la minuta de reforma constitucional enviada por el Congreso de la Unión, sobre pueblos indígenas y afromexicanos.

Con esto, se reforma, adiciona y deroga el artículo 2 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, mediante la cual se establece la participación efectiva de las comunidades indígenas y afromexicanas en las decisiones que afectan sus territorios y recursos. La

Morena y sus aliados, justificaron que con esta ley buscan revertir las graves condiciones de pobreza, desigualdad, discriminación y exclusión estructural histórica en la que han sido sujetas y que se han traducido en agravios a sus derechos fundamentales.

Al menos 5 diputados tomaron la palabra y expresaron su “compromiso” con los pueblos originarios.

Reconocieron que persisten las condiciones de pobreza, de marginación, desigualdad, exclusión y discriminación que histórica y estructuralmente han sido presas las comunidades indígenas y afromexicanas.

“Ahora cada uno de los pueblos originarios de nuestra nación tendrán derecho a ser consultados de manera libre, previa, informada, adecuada y de buena fe, porque éste será un derecho que adquiere la categoría de derecho humano al cual tendrán acceso más de 23 millones de mexicanos que se autoidentifican como indígenas y que pertenecen a 68 pueblos indígenas”, detallaron.

En la discusión, resaltaron que con la reforma se promoverá el uso, desarrollo, preservación y difusión de sus lenguas originarias, así como fortalecer la medicina tradicional, siendo que Oaxaca hay 19 grupos étnicos y un pueblo afromexicano que entre todos se dominan 15 lenguas maternas con 176 variantes.