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Maira Ricárdez
No le veo la polémica a poner la seguridad en manos de Dios, respondió el Munícipe de Juchitán de Zaragoza, Emilio Montero Pérez, tras el revuelo suscitado por la propagación de un video donde con llave en mano “entrega las llaves de la ciudad a Jesucristo”, estoy trabajando con todos los sectores afirmó, se han enfocado mucho dijo a este hecho y no se ha hablado de grandes logros en el combate a la inseguridad, el sector cristiano se ha sumado con enlaces como el que trabajo tras la narco guerrilla en Colombia, me seguiré reuniendo con todos los sectores, no solo con los cristianos, respondió en entrevista con ORO Noticias.
Conviene mencionar que de acuerdo al Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, hasta el cierre del 2018, Juchitán se mantenía dentro de la lista de los 10 municipios más inseguros no solo del Estado, sino de todo nuestro país, abordamos de frente el problema reiteró el Munícipe afiliado al partido Morena; dijo desconocer si estas reacciones son golpeteo político pues está muy ocupado en su trabajo, dijo trabajar en las noches y madrugadas, sé que me pueden hasta matar declaró, pero está dispuesto a trascender como un Munícipe que sí trabajo en el combate al más grande flagelo de la región: la inseguridad.
En torno al tema “tiempo de oración y proclamación” convocado el pasado sábado a las 6 de la tarde a las afueras del Centro Escolar Juchitán, Montero Pérez descartó haber violado los artículos de la Constitución Mexicana 24 y 130, y la ley de Asociaciones Religiosas y Culto Público que definen la división entre Estado e Iglesia, soy una persona laica dijo y no se usaron recursos públicos en esta convocatoria, fui invitado dijo, para después reconocer que fue él quien firmó la circular membretada que convocó a este “tiempo de oración”.
Cabe señalar que el Presidente de Juchitán no es la primera autoridad que recurre a este tipo de actos alusivos a “mejores tiempos” para su demarcación, hace al menos tres años lo hizo la alcaldesa de Monterrey, Margarita Arellanes, lo mismo que otros tres presidentes municipales: el alcalde de Guadalupe, Nuevo León, César Garza; el de Ensenada, Baja California, Enrique Pelayo Torres; y el edil de Benito Juárez, Nuevo León, Rodolfo Ambriz, quienes también entregaron sus municipios a Jesús para que instalará ahí su “reino de paz”.
