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Humberto Cruz
Los terremotos del 2017 en la región del Istmo de Tehuantepec, dejaron una estela de devastación, luto e incertidumbre.
Los daños en las escuelas publicas se podían medir no solo por la magnitud de la destrucción, sino en la tristeza de los alumnos porque además de los daños en sus viviendas y en sus calles, vieron destruidos los edificios que sirvieron no solo para aprender; eran el refugio, la esperanza, el origen de los sueños y amistades el lugar de juegos y el primer escalón para el deporte.
En Oaxaca principalmente en la región del Istmo, la fundación Iberdrola invierte 80 millones de pesos en trabajos de reconstrucción en beneficio de 50 escuelas y casi 10 mil estudiantes.
Justo ahora, continúan los trabajos en la Escuela Inicial Indígena de Santa Cruz Bamba, en Santo Domingo Tehuantepec y en el plantel número 43 del IEBO del Morro Mazatlán.
