Sin reconocer abiertamente traspiés cometidos por su subordinado el Fiscal Anticorrupción, Jorge Emilio Iruegas Álvarez en los procesos legales que llevaron a la aprehensión y reclusión de funcionarios de primer nivel de la administración del ex gobernador Gabino Cué, mismos que hoy gozan del beneficio de esperar veredictos desde la comodidad de su hogar; el Fiscal General del Estado, Rubén Vasconcelos Méndez, reconoció que ha habido muchas quejas por parte de barras de abogados y conocedores del derecho respecto al trabajo de la Fiscalía Anticorrupción.

Empero lo anterior, insistió en que las medidas dictadas en torno a estos casos, han sido promovidas por las defensas de los indiciados, y aceptadas por los jueces, el  tema central aquí es que es derecho de los imputados no pasar el proceso privados de la libertad, se trata del principio de presunción de inocencia, fundamental en el nuevo sistema de justicia penal.

Con la reforma recientemente aprobada por el Congreso del Estado dijo Vasconcelos, se dan cambios importantes; se dotará de dinero y recursos a la Fiscalía Especializada en Combate a la Corrupción, ahora los involucrados solo están en espera de que el Congreso autorice esto para dar operatividad a la instancia en cuestión; en igual circunstancia se encuentran 15 unidades de la Fiscalía, tampoco tienen cobertura presupuestal, lo que se buscará enseguida es que a todas se les pueda designar presupuesto de manera independiente, dijo.

Resolver problemas de décadas cuesta trabajo, dijo, pero con el nuevo reglamento se refuerza el concepto de trabajo unido pata atender a la población, la idea es el  fortalecimiento de la institución.

Por último, el Fiscal del Estado, a pregunta expresa de los medios, se refirió al reciente multihomicidio en la Mixteca que dejó como saldo fatal un total de 6 muertos, indicó que las indagatorias han arrojado ya una línea de investigación muy solida, descartó nuevamente que tenga relación con un conflicto agrario, el origen tiene relación con un evento delictivo, estableció.