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Jaime GUERRERO
En lo que ha sido la tónica de los diputados de Morena, PT, PES y PAN, legisladores locales, vilipendiaron al titular de los Servicios de Salud de Oaxaca (SSO), Donato Casas Escamilla, a quien lo calificaron de ineficiente y mentiroso por presentar cifras que, no corresponde a la situación de Oaxaca en materia de Salud, en la Glosa del Segundo Informe de Gobierno.
De paso pobladores de la región de la Mixteca, le protestaron en el recinto legislativo, para reclamarle la inconclusión del Hospital Regional de la Mixteca, debido a que aún estaría pendiente el equipamiento del nosocomio.
Antes, los diputados y diputadas, obligaron a Casas Escamilla, a ponerse de pie y realizar un juramento, sobre la veracidad de la información que presentaba ante los diputados de la LXIV Legislatura.
La más severa en sus cuestionamientos fue la diputada panista, María de Jesús Mendoza, quien fue más allá, al pedir a la Comisión de Salud, que las respuestas de Casas Escamilla, se integraran a la Cuenta Pública del 2018 y sean remitida al Organismo Superior de Fiscalización del Estado (OSFE).
Tras una serie de críticas y advertencias, se dijo “encabronada”, porque el pasado lunes, solicitó a Casas Escamilla, apoyo para la atención de Aurora Cruz Ignacio, mujer de 7 de meses de embarazo, con la fuente rota y hasta el día de hoy no es atendida adecuadamente.
“NO hay calidez ni calidez. No se vale que venga aquí a decir mentiras, porque hay miles de casas en Oaxaca”, lanzó desde la tribuna.
Afirmó que los números e informe chocan con la realidad de Oaxaca, pues mientras se presumen acciones y conclusión de hospitales, hay ciudadanos que manifiestan no tener un lugar para atenderse.
Fue en una segunda intervención, cuando la panista interrumpió a Casas Escamilla, quien se equivocaba en nombres de diputados y no atinaba a dar respuestas. Lo mismo el equipo y subsecretarios de Casas Escamilla, no atinaban a darle las tarjetas correctas a su jefe. Para el titular de los SSO todo fue un caos.
“Ustedes están dispuestos a escuchar a éste señor. Yo no”, soltó Mendoza y acto seguido abandonó el recinto legislativo. Lo mismo, el protagónico, César Morales Niño, quien se enfadó porque Casas Escamilla, confundió un nombre de un diputado.
Casas Escamilla, aseguró a decir que la recomendada de la diputada panista, si era atendida.
Fredy Delfín, de Morena, también arremetió contra el titular de los SSO, y aseguró que las cifras presentadas eran una burla para los oaxaqueños. Me atrevo a pedir su renuncia”, soltó.
Intempestivamente, la priísta, Lilia Mendoza, salió en defensa de Casas Escamilla, entre dimes y diretes verbales.
En medio del caos verbal, Casas Escamilla, era increpado e interrumpido en su exposición, provocando confusión, desesperación y múltiples errores informativos y verbales en el titular de los SSO. Los subsecretarios y subsecretaría de los SSO, en nada ayudaron a su jefe que dejaron solo, al grado de que el coordinador de los diputados locales del PRI, Alejandro Avilés, subió a sermonearlos.
En su primera intervención, Casas Escamilla, enlistó cifras, logros en materia de infraestructura, abasto de medicamentos y rezago.
“Lo que pasa es que no tiene buenos asesores y colaboradores”, le asestó, Delfín Avendaño.
Vinieron las réplicas. Arcelia López Hernández de Morena, indicó que las cifras no engañan a nadie, pues solo son mentiras los números informados y le reclamó que el nosocomio de Tlaxiaco no estaba culminado.
Arsenio Mejía del Partido Encuentro Social (PES) indicó que las obras anunciadas solo son elefantes blancos, pues no brindan el servicio por lo que fueron construidos.
El Diputado Emilio Joaquín García Aguilar, de Morena, señaló que la Secretaría de Salud está reprobada por su negligencia e incapacidad para atender a las familias oaxaqueñas. El legislador cuestionó a Donato Augusto Casas sobre las estrategias implementadas para que la dependencia solvente el pago a trabajadores de hospitales y clínicas.
Migdalia Espinosa Manuel, del partido Morena, señaló al secretario el abandono y las condiciones precarias en las que se encuentran los hospitales en Oaxaca, los cuales no responden a las exigencias ciudadanas.
Espinosa Santiago aseveró en tribuna del Congreso Estatal la presencia de “ elefantes blancos” en Oaxaca, los cuales son productos del daño al erario.
En su intervención, la Legisladora Arcelia López, de Morena, expresó que dentro del sector salud de Oaxaca persisten empresas externas que son utilizadas para el desvío de recursos públicos. La Legisladora señaló arbitrariedad del Gobierno del Estado para dar respuesta a las exigencias de mujeres y hombres de Oaxaca :“ Queremos honestidad y justicia en materia de salud ”.
De su lado, el diputado del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Gustavo Díaz Sánchez, recordó a los Diputados presentes que el daño al sector salud que enfrenta Oaxaca es consecuencia de acciones equívocas y deshonestas de administraciones anteriores. Puntualizó que la buena voluntad expresada por el actual Ejecutivo Federal debe servir como aliento al pueblo de Oaxaca para solventar errores del pasado.
A nombre del Partido del Trabajo (PT), el Legislador Saúl Cruz dijo a Donato Augusto Casas Escamilla que en el estado persiste insensibilidad institucional para lograr acuerdos con los trabajadores del sector salud, lo cual deriva en una crisis interna cuyas consecuencias privan de servicios al pueblo de Oaxaca.
La Legisladora Victoria Cruz Villar, del Partido Verde Ecologista de México (PVEM), señaló que es urgente que se de atención oportuna a las familias oaxaqueñas que requieran atención médica, añadió que debe ser prioridad de la actual administración el concluir el Hospital de la Mujer oaxaqueña.
El Diputado Arsenio Lorenzo Mejía del Partido Encuentro Social (PES), expresó que el acceso a los servicios de salud representa un mandato constitucional, lo cual no corresponde a la realidad del pueblo oaxaqueño pues persiste el desabasto en medicamentos y cobertura hospitalaria.
La Legisladora Aleida Serrano, del Grupo parlamentario de Mujeres Independientes en la LXIV Legislatura, señaló incongruencia en la distribución de los recursos del estado, en donde las y los trabajadores se ven perjudicados.
Tras más de 2 horas de dimes y diretes, Casas Escamilla, salió del recinto legislativo, custodiado a jolones, por los diputados del PRI, Avilés Álvarez y Mendoza Cruz, quienes trataron de blindar de los reporteros al funcionarios estatal.
