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Jaime GUERRERO
Por la caída el precio del barril de petróleo, durante el último mes, el litro de gasolina acumuló una baja de 20 centavos en su costo.
El hecho está relacionado con el decremento en el precio internacional del petróleo y no con una cuestión política, aclaró el presidente del Grupo de Empresarios Gasolineros de Oaxaca (EGEO), José Luis Ballesteros.
El empresario subrayó que si bien la disminución ocurrió casualmente con el cambio de gobierno de Enrique Peña Nieto al de Andrés Manuel López Obrador, la disminución en el precio del litro de gasolina no tiene que ver con una política de gobierno o promesa de campaña.
Incluso, en el presupuesto de ingresos 2019 se plantea mantener el IEPS, hecho que el miércoles durante la sesión del Congreso Federal fue motivo de discusión entre la fracción parlamentaria del PRI, PRD, PAN y Movimiento Ciudadano que exigían eliminar el impuesto, contra Movimiento Regeneración Nacional quienes buscan mantenerlo.
“Hay un decremento debido principalmente a factores internacionales como es el barril de petróleo. Este movimiento ya es percibido por el consumidor y obviamente, así como se percibe el decremento, el día que suba el petróleo vamos a notarlo”, dijo.
Diariamente el combustible registra variaciones a la baja en uno o dos centavos en las gasolinas más que en el diesel, sin embargo, la tendencia podría cambiar de un momento a otro, dependiendo del mercado internacional.
De acuerdo a Ballesteros, ese escenario permite que el gobierno federal cobre íntegro el cobro del Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS), el cual se paga por la producción y venta o importación de gasolinas.
Durante la administración pasada, hasta antes del 23 de noviembre, la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), aplicaba medidas de “suavización” a través del subsidio al IEPS conforme el incremento del costo internacional del crudo para evitar un alza importante.
Ballesteros precisó que el decremento registrado en el precio de las gasolinas es porque el barril de petróleo se encuentra en 50 dólares por unidad, mientras que en meses pasados llegó a estar hasta en 75 dólares.
“Para el gobierno tiene doble efecto, primero que pueda recaudar íntegro el IEPS, pero por otro lado, como productor de petróleo, el ingreso que le entra por la venta es muy bajo. Hay una doble arista a los ojos del gobierno federal, aunque para el consumidor mexicano es bueno que baje el petróleo”, declaró.