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Jaime GUERRERO 

De acuerdo al informe del Índice Estatal de Capacidades para el Desarrollo Social 2018 (IDES 2018), que mide la capacidad de las 32 entidades federativas para la implementación de una política de Desarrollo Social informada en evidencia, orientada a resultados, transparente y participativa, Oaxaca se ha estancado en este rubro, alcanzando apenas una calificación de 58.6 por dimensión generada.

Actualmente, 2 millones 847 mil 341 están sumergidos en pobreza, de los cuales 1 millón 760 mil 185 están en pobreza moderada; 1millón 087 mil 156 en pobreza extrema.

De su lado, la titular de la Secretaría de Desarrollo Social y Humano, Yolanda Martínez López, reportó que de acuerdo a la última medición multidimensional de la pobreza, el Consejo Nacional de Evaluación de la Política Social (CONEVAL), reportó que en los últimos 6 años, el porcentaje de pobreza pasó de 67 por ciento a 70.4 por ciento. Esas cifras las reportó en su comparecencia ante la LXIV Legislatura, como parte de la glosa del segundo informe del gobernador, Alejandro Murat Hinojosa.

Así, en nivel de cumplimiento al combate a la pobreza en 2018, disminuyó su capacidad en -6.3 puntos; en 2017 se ubicaba en 29.6 puntos y en 2018 se ubicó en 23.3 puntos.

De los más de 40 programas que se implementaron para revertir el rezago social en 2018, sólo fue posible identificar 25 programas sociales estatales con reglas de operación que regulan su funcionamiento, de los cuales únicamente 19 se encontró la definición de la población potencial que busca atender.

Asi mismo, el documento refiere que  no fue posible identificar una estructura programática estatal que dé cuenta, tanto del conjunto de programas implementados en el estado, como aquellos que están, particularmente orientados al desarrollo social.

Ese panorama, exhibe el fracaso de la política social de la titular de la Secretaría de Desarrollo Social y Humano, Yolanda Martínez López.

Cabe destacar que según publicaciones, organizaciones civiles manifestaron su inconformidad con su designación. El coordinador de Programas de la Unión de Comunidades Indígenas de la Zona Norte del Istmo (Ucizoni), Carlos Beas Torres dijo que Martínez López carece de experiencia y especialmente de conocimiento de la realidad social oaxaqueña, puesto que desde no vivía en Oaxaca desde la adolescencia.

A su vez, el coordinador general de Servicios para una Educación Alternativa (Educa),    Marcos Leyva Madrid dijo que la designación de López Martínez evidencia la improvisación en la política social.

Así mismo, en 2016, un año después de que Yolanda Edith López Velasco, madre de la hoy titular de Sedesoh, asumiera su puesto como legisladora federal, el presidente municipal de San Pedro y San Pablo Teposcolula, Felipe de Jesús Morales Lara, denunció que la “representante popular” y sus allegados estaban involucrados en un presunto quebranto de 6 millones de pesos.

Ante diversos medios de comunicación, Morales afirmó que su administración había sido víctima de un fraude, luego de que pagó dos anticipos económicos por el mismo número de obras a una empresa ligada con los Martínez López. Los proyectos involucrados eran la pavimentación de la avenida Tecnológico y la construcción de un salón de usos múltiples.