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Maira Ricárdez
Cuando la temporada de lluvias llega, se generan focos de alerta para el organismo operador de agua potable y drenaje, pues los llamados emergentes para atender inundaciones se vuelven la constante en tardes y noches de tormenta principalmente.
Son dos socavones de importante dimensión los que el Sistema de Agua Potable y Alcantarillado de Oaxaca (Sapao) ha atendido en este período, el primero de 10 metros de diámetro en Viguera, 1 metro y medio de ancho por 4 metros de profundidad, para atender el tema 24 metros lineales fueron rehabilitados.
El segundo en la Colonia Jerusalen en Xoxo, 4 metros de diámetro por 3 metros de profundidad, en la zona 60 metros lineales fueron rehabilitados., así lo informó la Directora de Sapao, Laura Vignon Carreño.
El taponeamiento de sistemas de recolección pluvial es tema aparte y se convierte en la principal problemática que requiere de atención inmediata para evitar afectaciones; afectaciones consecuencia directa de la irresponsabilidad ciudadana: abandono de basura en la vía pública o descarga de materiales para construcción, grava o arena y dejarla ahí durante meses, esto será el tapón perfecto en una tarde o noche de tormenta.
Vignon refirió como al colapsar los sistemas y llegar el personal con el equipo vactor para desazolvar se encuentran desechos impensables, alguna vez el cuerpo de un becerro, entre otras miles de variantes. Esto que la misma población deja abandonada en algún momento, genera en promedio 10 llamadas al día en este período de lluvias, entonces el personal que tendría que estar abocado a temas relacionados con el agua potable o el mantenimiento de los conductos del drenaje, se ocupa en despejar estos taponeos.
Las colonias más bajas son las de mayor riesgo subrayó la Directora, porque es donde finalmente bajan las corrientes cuando no encuentran cauces naturales, por tanto son estas zonas las que más deben cuidar el desasolve de sus alcantarillas.
