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Maira Ricárdez
No bastan operativo disuasivos para buscar garantizar la seguridad, hacen falta estrategias de inteligencia coordinadas para dar golpes certeros, y el tema será puesto en la mesa en la reunión de alto nivel que el próximo miércoles sostendrán en la región de la Cuenca del Papaloapam, el Gobernador de Oaxaca, Alejandro Murat y el Gobernador de Veracruz, Cuitlahuac García, encabezados por el Secretario de Seguridad y Protección Ciudadana del país, Francisco Alfonso Durazo Montaño, acompañarían esta reunión los Presidentes Municipales de la región y las instancias de seguridad y de justicia de ambos estados.
Lo que actualmente se vive en la Cuenca dijo el Fiscal General del Estado, Rubén Vasconcelos Méndez, es un fenómeno delictivo que no respeta fronteras y la responsabilidad para su atención es tanto de Oaxaca como en Veracruz, consideró; investigaciones revelan anotó que muchos de los crímenes que se contabilizan en la Cuenca han sido planeados en Veracruz, y Oaxaca solo cruzan el límite para ejecutarlo en Oaxaca.
Cabe señalar que la reunión se da tras la aseveración en días pasados, del Presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, de que la región de la Cuenca del Papaloapam en Oaxaca era la región más violenta, donde las ejecuciones han alcanzado incluso, a autoridades municipales, esto en alusión del asesinato del Munícipe de Jalapa de Díaz y su Síndico, Arturo García Velázquez y Javier.
El funcionario estatal insistió en que se deben aprovechar y emplear las capacidades de inteligencia de las instancias federales, sin que en el tema queden excluidos los Estados; tendrá que haber una estrecha coordinación de esfuerzos y de eso dependerá la eficacia de resultados.
Los homicidios en México no han bajado desde el inicio de la guerra contra el narcotráfico, en 2007. Baja California, Guanajuato, Guerrero y Jalisco continúan como los estados más violentos del país, de acuerdo con información del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública.; le siguen Chihuahua, Veracruz, Ciudad de México, Michoacán, Puebla y Oaxaca, que en 2019 sumaron poco más de la mitad del total de homicidios en todo el país.