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Jaime GUERRERO
A pesar del cambio de semáforo de rojo a naranja en Oaxaca, el sistema de transporte público no se incrementó, se mantendrá al 45 por ciento y sería en el transcurso de esta semana cuando la Secretaría de Movilidad, valoré si es necesario incrementar la flotilla o no, informó la titular de la Semovi, Mariana Nassar Piñeyro.
De acuerdo a la Norma Técnica NT-OAX-SEMOVI-03-2020 emitida el pasado 25 de abril, por la Semovi, para atender la emergencia sanitaria por el COVID19, fueron suspendidas temporalmente 14 rutas.
Los horarios fueron modificados y servicio de transporte urbano sólo se presta de las 6:00 a 19:00 horas de lunes a domingo; mientras que las rutas que circulan por las zonas de hospitales continuarán dando el servicio después del horario establecido.
Nassar Piñeyro, aseguró que, hasta este momento, todas las empresas y concesionarios han cumplido con los protocolos sanitarios establecidos para evitar el contagio de la Covid-19, por lo que las sanciones han sido esporádicas y mínimas.
En el caso de los taxis capitalinos, destacó que con sus propios recursos establecieron protecciones de acrílico tanto para la seguridad de los conductores como del pasaje. En los operativos detectaron que salvo uno o dos taxistas no portan cubrebocas.
Nassar Piñeyro, destacó que en el semáforo rojo la demanda del transporte público en la modalidad de autobús bajó hasta el 30 por ciento, sin embargo, al reactivarse algunos establecimientos comerciales con el cambio de semáforo, el aforo podría incrementarse.
De ser necesario se autorizaría la circulación de más autobuses o el incremento en las frecuencias, por lo pronto se mantendrá.
“Veremos cómo se comporta la demanda en este momento en que ya abrieron algunos restaurantes, hoteles, aunque a poca capacidad pero que ya abrieron y se verá reflejado en los siguientes días tanto en la gente que va a ir a trabajar como en gente que requiere de estos servicios para desplazarse”, declaró.
Por lo pronto, la funcionaria pública pidió a la ciudadanía evitar abordar unidades cuyo conductor no porte el cubrebocas o no respete las medidas de sana distancia.
“Si vemos que hay un chofer que no porta su cubrebocas, no hay que subirse y hacerlo en los que sí lo porten para hacer presión ciudadana sobre quienes no cumplen con las medidas sanitarias”, destacó.
