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Maira Ricárdez
El periodismo de investigación es y será la mejor arma ante la polarización y estigmatización al trabajo de los medios de comunicación por la misma Presidencia de la República; no hay censura, las herramientas para hacer periodismo están dadas y lo que deberemos hacer es comprometernos como medios de comunicación y evidencias los excesos que se cometen en todos los niveles de gobierno, cada que la primera figura en el poder diga “yo tengo otros datos”, evidenciar la verdad con las herramientas del periodismo de investigación., afirmó al concluir el Conversatorio el periodismo y la libertad de expresión, la Directora General del Semanario Zeta de Tijuana, Adela Navarro Bello.
Del 2013 a la fecha aproximadamente el periodismo en México ha lanzado grandes productos de periodismo de investigación que marcaron la diferencia entre el antes y ahora en medios; la casa blanca; el reportaje denuncia la compra de una mansión de siete millones de dólares por parte de Angélica Rivera, esposa del presidente y Primera Dama de México, a una compañía de Grupo Higa, una empresa con contratos de obra pública durante la etapa de Peña Nieto como gobernador del Estado de México, ó la estafa maestra: una investigación que revela la existencia de un sistema de 128 empresas fantasma a través de las cuales el Gobierno de Enrique Peña desvió más de 400 millones de dólares a través de una red de desvíos de dinero que involucró a 11 dependencias del Estado, ocho universidades públicas, diversas empresas privadas y más de 50 servidores públicos de distintos niveles de gobierno., son solo algunos ejemplos, opinó.
Se refirió también en este contexto a hechos delicados, como la existencia de muchas noticias falsas o medios creados para comunicar por consigna; de ahí la necesidad de la profesionalización de la información y el arraigo de la ética de quienes construyen el periodismo.
La periodista, con 30 años de experiencia laboral, finalizó al señalar que no hay justicia y todo indica que en esta administración tampoco la habrá; suman más muertes y delitos cometidos contra periodistas en el ejercicio de su profesión y la Fiscalía General de la República se queda corta en respuestas, no hay un trabajo serio y esto vulnera el ejercicio profesional de la libertad de expresión.