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Jaime GUERRERO

La contingencia sanitaria y sana distancia por el virus COVID19 que amenaza la humanidad, poco importó a los militantes del PRI en Oaxaca. Éste domingo se aglomeraron en la sede estatal de la Confederación Nacional Organizaciones Populares, para festinar a la única fórmula que se registró para encabezar la Presidencia y Secretaria General del Partido Revolucionario Institucional hasta el 2024.

Funcionarios estatales, dirigentes de sectores y organizaciones, todos entornos a Eduardo Rojas Zavaleta y Amirani Morales Velasco, subsecretaria de salid, candidato a la presidencia y cadidata a la secretaría general del PRI. la candidatura ya estaba pactada, fue de dedazo.

Pese a las pocas medidas de prevención, decenas de personas se congregaron en el edificio de la CNOP. Ahí ya esperaban ex dirigentes, diputado locales, ediles, entre ellos, Frey Gil Pineda Gopar, la polémica Maritza Escarlett Vázquez Guerra, ex diputados locales como Gustavo Marín, Adriana Atristain Orozco, el ex edil de Santa Lucia, Raúl Cruz.

Los abrazos, apretones de manos, hasta besos se hicieron presentes entre la nomenclatura priísta. Muy pocos eran los conscientes, se saludaban con la mano en el pecho, otros levantando la mano y muchos más chocando los puños, sin tomar en cuenta que está estrictamente prohibido por las autoridades sanitarias evitar el contacto físico por el contagio del Covid19.

Lo mismo, la sana distancia de 1 metro 50 centímetros no importó, todos los priistas estaban aglomerados, pese a que pocas mujeres y hombres de ese instituto político, portaban cubre bocas.

La diputada Yarit Tannos Cruz, con un letrero a frente: “sana distancia”, pero a 30 centímetros de ella, todos los integrantes de la Comisión de Procesos Internos, encabezada por Orlando Hernández.

Con sus aires protagónicos, arribó a la sede de la CNOP, Rebeca Cervantes, quien no tuvo empecho en mofarse del proceso legal que supuestamente enfrenta, sin precisar cuál. Y es que Tannos Cruz, le arengó: “rebeca, rebeca, con pompones”.

Que no ves que yo enfrentó un proceso legal”, matizó con burla. Más una militante del PRI observó la escena.

Cervantes, ha sido señala de amenazas por parte de una candidata da diputada federal. Lo mismo, la ex delegada de la PROFECO, ha cobrado polémica por el caso de hijo Alfredo Delgado Cervantes, quien es señalado de estar involucrado en la muerte de la joven Ivanna Mingo, Rebeca y su hijo Alfredo, habrían abandonado el cuerpo de la joven a su suerte y hoy los familiares claman justicia.

Por lo pronto, en el arribó de Rojas Zavaleta y Morales Velasco, que fue escoltado por el coordinador de los diputados locales del PRI, Alejandro Avilés Álvarez y Jorge Ilescas Delgado, esposo de la subsecretaria de salud, todo fue aglomeración, besos y apretones de mano.

El salón José “Che” Murat de la CNOP, fue la sede para la entrega de la documentación requerida para la solicitud de registro.

Tras los respectivos, discursos, nuevamente todos fue aglomeración. La sana distancia nunca importó.

Otras vez, los choques de mano, abrazos, todos festinando entornó a Rojas Zavaleta. En la sede de la CNOP permanecieron desde las 9 horas hasta las 2 de la tarde, para recibir de trámite la solicitudes de registro del ex titular de la Sedapa y la que aún sería funcionaria del gobierno del Estado, cuyas candidaturas ya estaban pactadas.

De paso, Rojas Zavaleta, anticipó que llamará a quienes se han ido del PRI al no haberles dado oportunidad de buscar algún puesto de elección popular.

Prometió que van por un partido que recorra cada calle de cada colonia de las diversas agencias y municipios del estado, van por un PRI cercano a la gente, por un PRI que tienen buenos gobernantes, por un PRI que no le falla a la gente, y tan cercano que ayer poco le importo la contingencia sanitaria por el Covid19 que ha dejado un estela de muertes y contagios en diversoa países del mundo, por pasar por alto la sana distancia y medidas preventivas sanitarias.

En la entrada del salón José “Che” Murat de la CNOP, el personal de ese instituto político pese a que dotaba de gel antibacterial para los asistentes y cubrebocas, pocos hicieron caso.